viernes, octubre 08, 2004

De grasosas desgraciadas

Que provocan brotes psicóticos colectivos, que mal cocidas causan histeriquia colis, que no son de carne de vaca sino de gusanos, que son sintéticas y plásticas...Hazte la fama, decía mi abuela. Y las famosas (asquerosas y grasosas) hamburguesas capitalistas se burlaron de la pobre viejita, invadiendo y conquistando estómagos subdesarrolados por varios decenios.

Parece que Yanquiland no es sólo sinónimo de fast food, terrorismo, cine, droga, capitalismo, guerra, fama y fortuna. La imperiosa necesidad de vencer al cerebro nipón, los está llevando a ponchar desesperadamente todo aquello que camine, vuele, explote, hable, proteste, muestre o joda. Ah sisi, hay que admitir que a veces les sale bien, como ese 11/9 en el que cualquier aficionado cobraba 2 lucas por una imagen morbosa: "live from New York city."

El sujeto -por ahora- desconocido produjo un documental, en el que un voluntario de 30 años se alimentó durante un mes sólo de un COMBO de la millonaria franquicia de los arcos dorados. El pack prometía brindar todas las proteínas y minerales necesarios, sin ocasionar ningún efecto maligno en la salud.

La cosa se pone “jugosa� cuando al ver los análisis posteriores, cualquiera pensaría que pertenecen a Linda Blair antes del exorcismo: 14 kilos más, arterosclerosis, dermatitis, úlceras, palpitaciones, hipertensión, dificultades en la visión, colesterol, gastritis...sin mencionar el decreto del médico: “una semana más y no contás el cuento�.

Qué loco, pensar que el mundo se autoimita y autodestruye constantemente...a ver si que elegimos mejores modelos...

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