Intríngulis Chingus

Rapto inconciente clishé: me imaginé náufraga en una isla paradisíaca, o en la selva, o en un submundo desconocido...¿Demasiado cine? quizá...La actividad onírica en estado stand by suele ser más rica y bizarra que en los pocos segundos de la famosa fase NREM...

Entonces, vestida con una hoja de palmera, (todos los náufragos dejan su equipaje en el barco, habría que cambiar esos guiones) entro a mi casa de troncos y preparo la cena: calamares en su tinta con salsa de coco. Todo fantástico: la puesta del sol sobre el mar, las caminatas en la orilla, la luna llena platinada, la arena color arena, tan suave que parece harina...el sonido del viento, la danza de las ramas...

Caían conmigo las ataduras tecnológicas que propone la evolución...Y ahí, cayendo, me vi despojada de todo lo supuestamente prescindible, hablando conmigo en ese lejano paraje, supuestamente el paraíso sobre la tierra, en el que cualquiera elijiría vivir...

Qué sería de mí más de un año sin:

- El cepillo de dientes (imposible)
- El agua potable (qué asquete tomar agua salada)
- La almohada (la de tronquitos no me va)
- La música (es que los pájaros cantan muy bajito)
- La maquinita de afeitar (es cierto que seremos pelados?)
- La Pc (habrán elefantes con conexión Speedy?)
- El jabón, shampoo y enjuague (quiero ser pelada ya!)
- La cámara de fotos (para demostrarme que estuve ahí)
- La crema Hinds (quiero ser pelada y perfumada!)
- Un libro (que sea enorme y sin final)
- Papel (qué bueno, aprendería Origami)
- Leche (y si me llevo una vaca a la isla?)
- El Raid (y algún serpienticida)
- Un ser humano (con quien hablar, escuchar, reír, llorar y abrazar)

...Prometo firmemente no desconectar, desarmar ni arrojar más mis útiles maquinolas malditamente necesarias made in Taiwán...

Comment al Margen: no, no me equivoqué...o acaso no somos parte de la evolución?...(ok, también debería recordar ciertos humanoides somatizados en ochentosos tupperwares)