En el bolso

Cosas que aprendí:

-Estar cerca es muy lindo (no, no es otro slogan :P)

-Estar lejos es parte de que estar cerca sea tan lindo

-Aquí adentro, las distancias ya no existen

-Enfrentar la cama fría y vacía, es cada vez más difícil

-El miedo se calma con mimos

-La incertidumbre es directamente proporcional a la ansiedad

-La ansiedad se calma con mandarinas

Cosas que me traje:

Ice age 2 y muchas risas. La lluvia y alguna lágrima. El frío y el calorcito. La estufita. Los ojos cerrados. Los sueños. Los amigos y las medialunas. La PIZZA y la promesa de panqueques. Un cargador y 3 mensajes. Un papelito y la curiosidad. Porris, lagartos, escarabajos, rol y rock. Médicos y más médicos. El mito del subte de madera. Gatos. Gatitos. Música. Huevitos de chocolate. Las fotos y las imágenes. La conexión. Un sillón somnífero y todos los abrazos.

Ah, sí, volví. (y también aprendí que extrañar no es nada extraño)

Esta vez: con bingo y todo

Hay una sola rutina que está buena: la que sirve para aprender y mejorar. Por ejemplo, qué bueno poder armar el bolso con mucha tranquilidad y mucho espacio de sobra, sin corridas contra el tiempo, histerias de selección, urgencias inoportunas ni gastos imprevistos.

Eso sí: capaz que me olvido la cabeza y la dejo en remojo unos días. O las llaves.

En su lugar los mimos y las risas, y un back up de los mimos y las risas, por si en algún momento me da ganas de ponerme la cabeza de nuevo.

Y un huevito de chocolate.







Felices Pascuas!... Hasta pronto =)

Tiempo!

Que después de la tormenta sale el sol.
Que no hay mal que por bien no venga.
Que siempre se abre una ventana cuando se cierra la puerta.
Blahhhh...

Es hora de tirarme en el pasto y cerrar los ojos.
De sacarme la mochila y las zapatillas.
De sonrisas. Y galletitas.
De capuccino y tiramisú.

Es tiempo de abrazos.

chau tiranosaurio, quiero un gatito.