sábado, marzo 26, 2005

Yo fui testigo

Era un día más en sus insondables vidas morochas y loosers. Durante el díatrabajarían, harían negocios, comerían algo al pasar y si la noche ameritaba, saldrían a ahogar infinitas penas en besos y vasos...
Pero esa noche estaban preparando algo que cambiaría sus rumbos para siempre. Tenían un plan.

Cansadas de sumergir ilusiones en seres gélidos y descorazonados, estatuas decorativas o histéricos yupies, Carol y Coni decidieron que todos sus problemas estaban en su cabeza. Más precisamente en su pelo. A su alrededor, la proliferación de la era blondie era un éxito: viejas, jóvenes, adolescentes, negras, blancas y árabes, flacas, gordas y operadas, histéricas, huecas o brillantes, ...toda aquella fémina que luciera o luciese alguna clase de rubiez, tendría el estrellato asegurado, dejaría petrificado a cualquier hombre que se le cruzara, y si no éste no fuera de su apetencia, seguro saldría airosa taconeando por las calles al ritmo de you're so sexy, sexy, sexy...

Entonces, sólo quedaba un camino: Carol y Coni, susurrando entre copa y copa, finalmente depositaron su futuro en un pomito de Loreal rubio hot...
A partir de ahora sus destinos tomarán otro color...Habrá que ver si las raíces son tan fuertes como fueron ellas alguna vez...

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